jueves, 3 de abril de 2008

¡Habla!

Dímelo a la cara
si es que aún te atreves a mirarla,
díselo a mis ojos,
mis pupilas van llenándose de lágrimas.

Ten ese valor
que ayer rogabas que tuviera yo en la cama,
para amarte sin murallas.

Dímelo a la cara si aún me amas,
mi mirada está borracha del recuerdo
y mis nostalgias van llenándose de ti,
y no me hablas.

Díselo a mi alma
si aun te atreves a llamarla,
y susúrrale al oído que es mentira,
que tan sólo son palabras.

Díselo a mi corazón dañado,
pero habla,
no te calles,
esta noche no, habla.

Háblame si puedes con tu alma,
háblame con tus pupilas,
háblame dando la cara…

Háblame, cariño, no me dejes,
no, no me des la espalda,
Háblame y no te vayas…

Aunque ahora que lo pienso,
cuando el tiempo pasa y pasa,
he comprendido que es mejor…
Que no digas nada.

© 2008 Santiago Alonso - Todos los derechos reservados

1 comentario:

Anónimo dijo...

Cuando era pequeña(unos cuantos anitos) salía por la noche en el jardín de mis padres para coger trozos de madera podrida un poco húmeda. ¡Me encantaba su brillo! Pensaba que había encontrado tesoros. Era tan feliz. Los metía en el gorro de mi padre y me metía con ellos en la cama, esperando tan emocionada que se haga de día para regalarles a mi madre. Pasaba casi toda la noche con los ojitos llenos de lagrimas de agradecimiento hablando con ni angelito de la guardia, imaginándome la felicidad de mi madre.
Por supuesto que por la mañana lo único que quedaba eran los torsos de madera podrido. Que desilusión que dolor. No entendía que ha pasado. ..y noche tras noche salía de casa en búsqueda del tesoro. Pensé que lo mejor si me quedo a dormir en el jardín no me van a quitar el tesoro.
Tampoco funciono. Y mi madre me metió una buena paliza por manchar las sabanas por salir de noche de casa por ser tan rara...Estaba tan triste que ni siquiera comía.¿Por que sé esta burlando de mi este travieso angelito pensé, he hecho alo malo? Miraba las estrellas y me preguntaba si dios me puede ver con lo lejos que esta el y lo pequeña que soy yo. Si subo en el tejado, hay arriba tiene mejor vista dije, pero tenia miedo a la altura; Puede que si no me muevo baja él para dejarme el tesoro y le pió, y le explicó que le angelito me quita el tesoro
Hasta que se entero mi madre que estoy haciendo y me explico que de noche por la luz de la luna la madera podrida brilla y es solamente madera tanto de día como de noche. Noooo, no mama es magia le dije llorando que se me rompía el alma. Tu no la vez pero yo si. Me lo ha enviado DIOS QUE ÉL ME QUIERE pero hay un angelito travieso y por los celos me lo quita cuando me queda dormida y me deja la madera.
Mi madre hizo todos para convencerme.........
Con el paso de los años comprendí que no todo lo que brilla a la luz de la luna tiene el mismo valor a la luz del día.
Que la magia esta solamente en nuestros corazones, en la profundidad de una mirada, en la belleza de una sonrisa, en la dulzura de una palabra y ternura de una acaricia.
Daniela,