martes, 24 de agosto de 2010

Hueco


Se quedaron huérfanas las caricias,
y mudó la piel que su labio recorrió,
se olvidaron los álamos del camino,
su recuerdo poco a poco se alejó.

Aún la noche deja hueco en su coraza,
aún el tiempo como huella tras de sí,
aún su aroma se esconde entre mis sábanas,
aún sonrío cuando no quiero reír.

Se quedaron huérfanas las sombras,
se quedaron huérfanas de ti.

© 2010 Santiago Alonso - Todos los derechos reservados

martes, 17 de agosto de 2010

Mano, alma, verso y lágrima


Mano que recorre el alma y acaricia el verso inmerso en una lágrima,

Mano que acaricia el alma y recorre inmerso el verso de una lágrima,

Verso inmerso en una lágrima que recorre la mano y acaricia el alma.

© 2010 Santiago Alonso - Todos los derechos reservados

jueves, 12 de agosto de 2010

A TRES METROS DE DISTANCIA


A tres metros de distancia te persigo,
siguiendo la estela que despliegas,
llenándome de luz, huella a huella,
camino de seguro hacia tu meta.

Y creo que he llegado al fin de tu camino,
descubro que es el mío el que reflejas,
y siento que a tres metros de distancia,
tus pasos me persiguen y me velan.

© 2010 Santiago Alonso - Todos los derechos reservados

AUSENCIA


Busco la palabra, encuentro el gesto.
En mi retina una mirada y en mi silencio una voz.
Un nadie más, no importa nada, el tiempo se detiene.
Comienzan los sentidos a brotar, y me siento un pétalo no nato, un halo de vida, un retrato que se alimenta de tu presencia. Sigo siendo la oruga envuelta en seda, el germen que espera a ser fertilizado, el vaso vacío preparado a ser llenado, el continente ansioso por sentir su contenido.
Ausencia.
Comienzo a sentir tu ausencia.
Mi boca se silencia.
El milagro comienza.
Mis brotes van creciendo incontrolados, y siento latidos nuevos que en pie me ponen, los pétalos se abren, vivo, tomo forma y soy.
Estoy.
Ya me siento mariposa, y mis alas se agitan juguetonas en tu ausencia, buscando con sus ondas tu presencia. El germen fertiliza, se llena el vaso, el contenido inunda el continente, y lleno de sentido los vacíos. Comienzan mis manos a dibujar palabras, y marcan un ritmo sincopado de letras, de tecleos que imponen notas musicales al silencio. Todo cobra otro matiz distinto que me resulta familiar. Y te siento amiga, hermana, unida de alguna forma a mí antes incluso del pasado.
Silencio.
Ya regresas.
Ya siento tu paso aquí cercano.
Y vuelvo a ser brote, apenas polen revoloteando.

© 2010 Santiago Alonso - Todos los derechos reservados